Escritos, poemas, reflexiones de amor y desamor


 

 


Imaginar...
Me gusta imaginarte dormido,
junto a mi lado amor mío,
me gusta imaginar que tomas vino,
mientras me miras a los ojos cariño mío,
me gusta imaginar nuestras manos,
entrelazadas,
tus besos y caricias por la madrugada,
me gusta imaginar que ya estás en mi vida,
que me cuidas y proteges,
que me digas ¡mía!
Me gusta imaginar...
En esta cruda realidad...





Foto...
Es la foto que tomaste,
de mi espalda desnuda...
La noche que pediste que fuera sólo tuya...
No olvido tus palabras,
y la forma en que me besaste,
en cada caricia, en cada poro
Tú nombre en mí tatuaste.


Mi inolvidable amor...
¡Contigo siempre ha sido así!...
Ya no quiero querer olvidarte,
ya no quiero luchar contra lo que no puedo, ya no forzaré mi corazón hacerlo, me rendiré ante el sentimiento...
Y algún día, dejaré de sentir este amor tan vivo por ti, tal y como el primer día.
No te daré explicaciones de porqué te sigo amando, ni te trataré de convencerte de algo que tú ya sabes y siempre has sabido... ¡Lo sientes dentro de ti! ¡Lo sé!
¡Yo, francamente, no te he podido olvidar!
Volverte a ver, para mí ¡realmente fue maravilloso!, me hiciste sentir una vez más una revolución dentro de mi ser...
Mi corazón temblaba... Mie estremecí por completo... Verme otra vez en tus ojos, me hizo tocar el cielo... Y cómo no, si siempre has llegado así a mi vida, revolucionando todo mi ser...
Y tengo la certeza de que lo que viví y sentí contigo, nadie más me lo hará sentir. ¡Contigo siempre ha sido así!...





No te sientas sola

A ti mi querida amiga, que me dices que te sientes sola...
Sola a pesar de que tienes muestras de amor al derredor de ti...
¡Abre los ojos! Hay gente que te amamos, sólo que eres demasiado egoísta, y crees que solamente tus cosas, tus asuntos son de sumo interés para todos, y no te das cuenta que sólo tú eres la culpable de alejar a todos de ti, porque siempre estás de mal humor, porque siempre refunfuñas que hace frío, que hace calor, que llueve, que el aire, en fin...
¡Tienes talentos y virtudes maravillosas! explótalas, saca lo mejor de ti, siéntete amada por ti, sólo así darás el primer paso para recuperar lo que eras, ¿Qué ha pasado contigo?
Porque dejas que los problemas te agobien de esta manera, ¡vive!
Piensa y escribe tus logros, por mínimos que sean, y te darás cuenta de cuantas cosas importantes haz hecho en tu vida, haz aprendido a caminar, a sonreír, a amar, cosas tan sencillas pero son tus logros finalmente, y tú, tú tienes que festejarlos...
Y estar orgullosa de ellos, no te sientas sola, si tienes a tu lado la persona que más te ama... y no te haz dado cuenta, date cuenta de ello y verás que es mucho más fácil ver y sentir cuantos más te aman también, esa persona de quien te hablo, ¡eres tu misma!
¡Ámate a ti misma, como tú quieres que te amen los demás!
Entiendes...



La costra

Tropiezas con una piedra y te caes al suelo. Cuando te levantas, notas que te sangra la rodilla y tienes una gran herida que no te permitirá poder caminar bien. Y duele, duele mucho, así comienza el doloroso proceso del cambio cuando hemos sufrido. Si no lavas esa herida, pude llegar a complicarse demasiado.

Es decir, si tú no comienzas a sacar todo eso que te causa dolor, y tratas de ocultarlo... la herida sanará mal... ¡Tú sabes que has llegado al extremo máximo!... ¡Y sabes que es necesario cambiar!
Si observas la costra, y la tocas... Dolerá, se encuentra inflamada y enrojecida... Y tú... quieres ignorarla... pero ahí esta, dañándote, y sabes que bajo la superficie, ¡suceden muchas cosas! ¡se ha llenado de pus!... Porque empezaste demasiado tarde a desechar todo el sufrimiento, el temor, la angustia, el dolor...

Y ahora, dolerá aún más... Porque sabes que tendrás que ¡arrancar la costra y lavar la herida!... pero esta vez lo harás bien... ¡con estropajo y jabón!, ¡Restregando, y restregando! hasta que la sangre mala se haya ido, y sangre nueva comience a salir... Tendrás que hablar de las cosas que tanto te han dolido, y llorarás y sufrirás más aún, porque todo eso que te daña lo tenías guardado sin querer darte cuenta que te lastimaba profundamente, y no querías recordarlo y no querías hablar de ello, por temor a verte así... Llorando desconsolado... Como un niño...

Querías guardarte muy al fondo de tu corazón todas aquellas palabras o insultos que te han hecho vivir desdichado, o todos aquellos malos pensamientos que te causaron remordimientos... La herida dejará de sangrar, después le pondrás quizá un poco de medicamento en polvo para que comience a secar y sanar... Ahora te sientes más tranquilo porque te has deshecho de toda esa pus que te martirizaba y no te dejaba ser feliz...

Has comenzado el proceso del cambio... y debes sentirte feliz y satisfecho porque has empezado a vencer el miedo, y las conductas destructivas... Pero siguen pasando más cosas en tu rodilla. A medida que el coágulo empieza a endurecerse y a secarse, se va formando una costra. Las costras suelen tener aspecto de corteza y son de un color rojo oscuro o marrón.

Así poco a poco con ayuda de tu terapeuta empezarás a notar el cambio en tu vida, y ya no dolerá tanto lo que has podido desechar, te darás cuenta que en la vida, podrás tropezar muchas veces... pero has aprendido a curarla... intenta no tocarla. Si te rascas o arrancas la costra, puedes deshacer la reparación y desgarrar de nuevo la piel, lo que significa que probablemente tarde más tiempo en cicatrizar.

Incluso te podría quedar una marca. Con el tiempo, la costra se cae para revelar la nueva piel. Esto quiere decir que si dejas de luchar... Que si te das por vencido... De nada te habrá servido la curación que te has hecho... Porque nuevamente comenzarás a caer en el miedo y la frustración...
Así con el tiempo te darás cuenta que la costra ha caído, y sólo queda una piel rosada y sensible...

Ahora, sabes que ha valido la pena el dolor y el sufrimiento, porque ya no hay más costra, sólo queda la cicatriz... Y sabes que ahí esta, pero ya no te hace más daño... ¡Por qué ha sanado! Así que nunca dejes pasar por alto tu costra...




Para ser feliz

Mentalízate para ser feliz,
Si tú realizas afirmaciones en presente, consciente y en primera persona durante 21 días, estarás generando una vibración positiva que el universo entero estará aceptando.
Capta la onda de tu pensamiento y la retiene ahí hasta que la vida empieza a acomodar los medios y las situaciones para que el deseo que tú pediste se dé por ley metafísica.

¿Por qué 21 días? Es el tiempo que al iniciar la repetición de un comportamiento definido y que es necesario para cumplir con lo que queremos hacer, tener, ser, o hacer, todo en lo personal como en lo laboral.

En metafísica una afirmación es una orden que se da para ser cumplida. Por último, escoger con mucho cuidado las afirmaciones que quieres trabajar, si deseas un cambio significativo en tu vida y equilibrado debes trabajar en tu sistema de creencias podrás obtener resultados maravillosos.
Recuerda siempre que los pensamientos negativos son los que viajan a mayor velocidad en el universo.

Todo lo que hoy es, todo lo que hoy está, lo que hoy sucede, ha sido previamente pensado.
Así que deshecha cualquier pensamiento que no te beneficie, ni te haga sentir feliz.
Al final de tus afirmaciones debes repetir... "Gracias Dios por haberme escuchado".
Puedes hacer tus propias afirmaciones, aquí te dejo algunas para que comiences a ser feliz...

Yo soy la presencia gobernante que me precede a donde yo vaya durante este día, ordenando perfecta paz y armonía en todas mis actividades:

1.-YO no hablo, ni permito que se me hable nada contrario a la perfecta salud, la felicidad y la prosperidad.

2.- YO le hago sentir a todo ser viviente que lo considero valioso.

3.- YO le busco el lado bueno a todo lo que me ocurre, y a todo lo que veo ocurrir a otros.

4.- YO pienso en todo lo mejor. Espero todo lo mejor. Trabajo únicamente por lo mejor.

5.- YO siento igual entusiasmo por lo bueno que le ocurre a otro que por lo que me ocurre a mí.

6.- YO olvido mis errores del pasado y sigo adelante a mayores triunfos.

7.- YO llevo una expresión agradable en todo momento, y sonrío a todo ser que contacto.

8.- YO no tengo tiempo para criticar a los demás. Ya que paso tanto tiempo mejorándome.

9.- YO me hago tan fuerte que nada puede perturbar la paz de mi mente.

10.- YO SOY demasiado grande para preocuparme. Demasiado noble para enfurecerme. Demasiado fuerte para temer. Demasiado feliz para permitir la presencia de algo negativo



Cambiando conductas

Cuando tienes la necesidad de pedir ayuda con el temor al que dirán, cuando pensamos que las cosas no nos salen bien, cuando pensamos que todo es en vano, cuando nos sentimos defraudados, desorientados, tristes, agobiados, reprimidos, etc. Es hora de enfrentarnos a la verdad, y descubrir que nos lleva a actuar de esta forma que nos daña, y que nos hace sentir tan infelices.

Para descubrirlo necesitamos ayuda profesional, el trabajo del terapeuta es ayudarte a modificar tu propia conducta, y el tuyo es ¡lograrlo! Si tú no cambias la forma en que te conduces, te seguirán ocurriendo las mismas cosas que hasta ahora te han hecho sufrir, cuesta mucho entender esto, porque no aceptamos que estamos mal, y nos resistimos a cambiar.

Cada uno de nosotros, tenemos una conducta que seguimos por patrones establecidos por la familia, o que vamos adquiriendo poco a poco a lo largo de nuestra vida, y estos patrones son los que se analizan para ver si son válidas o no en nuestra conducta.
Es un proceso largo, y pienso que los cambios serán en la medida de que tú quieras cambiar...
No puedes pedir al terapeuta que de la noche a la mañana cambie tu forma de actuar y la de los demás, sino a identificar que es lo que tú haces que provoque determinada actitud en otras personas, una vez que logren identificar esto, el siguiente paso es cambiar, a lo que te provoca sufrimiento.

Cada conducta tiene un motivo que la provoca, y que en su momento fue válido. Si ese motivo continúa siendo válido, es porque a través de la conducta estás satisfaciendo una necesidad que sigue estando vigente, y no va a ser fácil cambiar en tanto no encuentres una manera alternativa de satisfacerla, o consigas eliminar dicha necesidad.

El cambio de conducta no es nada fácil, porque aunque sean comportamientos equivocados, los hemos practicado durante mucho tiempo, ya que de alguna manera nos dan seguridad, pues si los dejamos de hacer entonces sentimos miedo a lo que podría suceder, pues sería una situación totalmente nueva para nosotros, la mayoría preferimos lo viejo y conocido.

El problema es que, a veces, eso viejo y conocido es justamente lo que está jugando en tu contra.
Para poder cambiar nuestra situación, tenemos que cambiar nuestra conducta, dejar esas viejas formas de comportarnos que durante tanto tiempo nos han servido únicamente para sufrir.

Debes ser sincero contigo mismo para poder cambiar tu rumbo, y esta es una de las cosas que cuestan más, porque comienzas por reconocer esos miedos que tanto tiempo has estado ocultando. Tomar y mantener la decisión de adoptar una nueva conducta es una de las tareas más difíciles, porque se oponen todos los miedos que han estado durante toda su vida tratando de mantener bajo control mediante la conducta que ha llevado hasta el momento.

Será un proceso doloroso, y difícil, pero si ya tomaste la decisión de hacerlo tienes que llevarlo a cabo con ¡coraje, amor y convencimiento! de que podrás salir adelante y conseguir dar un paso para tu crecimiento personal.



La otra

A veces nos sentimos tristes, melancólicas, poco valoradas, utilizadas, porque la relación que llevamos con nuestra pareja no esta del todo bien, o simplemente estás sola en busca de un amor que te transforme, que te llene, y que te haga sentir ¡viva!, y tratamos de llenar ese vacío con una nueva ilusión de amor...

Y por el afán de llenar rápidamente ese vacío nos equivocamos al relacionarnos con un hombre casado... entonces nos convertimos en "la otra" porque te ha hecho sentir importante, porque te dice palabras dulces, te dice cuan hermosa eres, (o sea te habla de lo que es obvio, que el se da cuenta que careces), respetada, (porque te habla correctamente, no te juzga, te acepta como eres) o quizás protegida (porque es un hombre que tiene solvencia económica, porque es maduro, porque te trata como a su "niña", etc.).

Él te dice que no está bien con su esposa, que no lo comprende, que discuten, en fin... te pinta un matrimonio desastroso... (Dentro de él, lo que quiere obtener, ¡es hacerte suya!... es demostrarse que aún es capaz de conquistar, pero no piensa dejar a su mujer, ni a su familia, tiene claro, "no involucrarse sentimentalmente").

Tú te sientes muy atraída, y no te importa el que tenga una esposa... porque te sientes enamorada, y estás dispuesta a todo... y por supuesto crees que si el te mintiera no estaría ahí contigo, pero te has preguntado entonces ¿Por qué no se ha divorciado?... Está claro, porque sólo desea una aventura contigo, por supuesto te dirá, que ella no le quiere dar el divorcio, o cualquier pretexto con tal de salirse con la suya... los hombres son bien diferentes de nosotras, ellos son carnales...

Mientras que nosotros somos románticos, amorosos, tiernos, ellos pueden tener sexo con otra mujer sin estar enamorados... Mientras que nosotras "hacemos el amor" porque amamos, no tenemos "sexo"... Nosotras lloramos y decimos lo que sentimos, ellos no demuestran sus sentimientos y se muestran duros y fuertes, nosotras que tenemos eso que le llamamos un sexto sentido casi siempre terminamos por descubrirlos… Ellos cuando son infieles, son poco suspicaces, cometen errores...

Así, que si tú ahora estás en esa encrucijada de tener una relación con un hombre casado valora la situación, si bien te va, pasarás días excelentes con él, te comprará cosas, te hablará con amor, habrá sexo apasionado... etc. Pero nunca dejarás de ser la otra... Sí son descubiertos... En ti, y sólo en ti, quedará el cargo de conciencia de saber que has destruido un matrimonio, que haz deshecho una familia, y habrás dejado un daño irreparable...

Te sentirás juzgada ante la sociedad por los pocos valores que has demostrado tener... Ante los ojos de Dios porque has faltado a un sacramento, pero sobre todo te habrás fallado a ti misma porque no supiste darte tu lugar ni valorarte, después de esto... Tarde que temprano la vida te lo cobrará... Ahora dime...

¿Quieres seguir siendo la otra?




¡Estoy gorda!

Me siento tan triste de observar a la gente, pareciera que no tienen sentimientos. Simplemente se basan en lo que hay por fuera, pareciera que no existe más que la atracción física, dicen que sólo los que somos gordos, aplicamos ese dicho que todos conocemos...

La belleza física acaba por terminar, y así es, y no lo digo porque esté gorda, sino porque realmente la belleza física acaba... y los sentimientos perduran por siempre... Sé que no tengo un atractivo formidable, pero soy una buena persona, soy trabajadora, noble, audaz, simpática, amable, cariñosa, leal, educada, estudiosa, soy Lic. En Psicología, tengo una maestría y un doctorado, soy culta, sé cocinar, sé bordar sé comportarme en sociedad, y sé y estoy segura de que cualquier hombre disfrutaría de mi presencia, sólo que no se dan la oportunidad de conocerme.

Porque también dicen que la primera impresión es la que cuenta, y lamentablemente para mí... cada día me doy cuenta de ello, he hecho grandes esfuerzos por bajar de peso, pero a veces me pregunto: ¿Para qué? estoy sola, no tengo a nadie, y a veces es difícil automotivarme, ¿por qué nadie me quiere? sólo soy una mujer que necesita cariño, amor... Y me siento tan triste... Y sola...

Por eso, cuando veas a alguien gordito que hace su mayor esfuerzo en el gimnasio por bajar de peso, no le tengas compasión, ¡motívalo! eso es lo que necesitamos cuando vemos a alguien como tú que es esbelto, y que nos motivan, que nos digan ¡Tú puedes! y con eso pondrás un granito de arena, y lograrás que cada día sea mayor nuestro esfuerzo, porque pensamos hoy tengo que ser mejor, ese señor, o señora, o chico o chica, creyó en mí, y no le voy a fallar…

A veces es necesario agarrarse de cualquier motivación para seguir adelante, hoy he bajado 13 kilos en cuatro meses y estoy feliz, pero soy una gorda finalmente y nadie me quiere…


Me divorcié... ¿Y ahora qué?

Tras el divorcio sentí un gran alivio, me costó trabajo aceptar que me sentía bien, eran tantas los sentimientos encontrados que no podía disfrutar del peso que me había quitado de encima, me pasé meses cargando mi costal de "culpas” pensando que era una fracasada, y que no encontraría un futuro estable...

Es muy doloroso vivirlo, porque el divorcio va en contra de tus propias creencias y valores, porque te casas pensando que será para siempre... y que serás feliz. Me imagino que habrá cientos de mujeres que se divorcian por muchas causas diferentes, infidelidad, incompatibilidad de caracteres, violencia intra familiar, etc. y se sienten en algún momento como yo me sentí...

Es cierto que me costó muchas lágrimas entender el proceso, y asimilarlo, sentí de alguna manera que se había muerto parte de mí, y entendí que era una especie de duelo, sin que mi pareja falleciera, mi vida cambió totalmente al reconocer que no fui una tonta, y tampoco víctima, sino que amé incondicionalmente, y eso me hacía feliz, el amor es dar... Y compartir, no ver "quien da más".

Ahora sé que todos amamos diferente, por eso buscamos un complemento en la pareja, porque tenemos la necesidad de llenar esos huecos que la pareja tiene, y tú no... Vive feliz si te has divorciado, y perdónate... perdónate por haber cometido errores, porque con ellos aprendiste, perdónate el haber perdido tiempo, porque el mismo tiempo te ayudó a tomar esa decisión...

Perdónate el no haberte valorado, porque te hizo más fuerte... Has aprendido y madurado, y serás feliz... Tu vida tiene que seguir... ¡Ama, vive, y disfruta!


Reflexionando

Muchas veces hemos sentido que los problemas nos agobian, sentimos que no hay solución posible, nos llenamos de coraje, de frustración, preguntándonos ¿por qué a mí? quizás lloramos, culpamos a todos, y la verdad es que pocas veces nos detenemos a reflexionar sobre lo que hacemos, lo que decimos o como actuamos...

Es increíble la cantidad de soluciones, o alternativas que tenemos para poder sobreponernos a los sentimientos negativos que a veces invaden nuestros pensamientos... No dejamos de pensar en eso que nos lástima, una y otra vez nuestros pensamientos vuelven al mismo punto...

Y lo hacemos porque no queremos perdonarnos, porque no sentimos ni un poquito de amor por nosotros, ¡Somos humanos!, ¡Tenemos derecho a equivocarnos!, no pasa nada... Sólo que somos demasiado duros con nosotros mismos, nos da miedo ¡volver a intentarlo!...

Volar, porque sentimos nuestras alas demasiado débiles, pero cuando tienes fe, el viento sopla a tu favor, ¡vuela! cierra los ojos ¡y déjate llevar!, siente tu corazón... Pidiendo a gritos que le des una oportunidad, no importa cuantas veces caigas, lo que importa es ¡Que no dejes de intentar!




¡Encuentra tu Everest!

Para poder subir una montaña no sólo debes tener una excelente condición física, o una buena técnica, sino estar preparado para aguantar temperaturas extremas de - 40° centígrados, tener actitud, motivación, fuerza, perseverancia, tolerancia, compañerismo...

No importa si eres hombre o mujer, la preparación física y mental debe estar al 100% en tu mochila, cargas exactamente lo mismo, porque tu equipo es tu vida. La mochila pesa de 15 a 17 kilos, además de que debe saber colocar los trampones y el piolet con la misma destreza y seguridad que los demás.

Después de esto, estás preparado para comenzar la lucha por subir y conquistar la cima... pocos, son los afortunados que pueden llegar, algunos, se quedan en el intento en el primer campamento al comenzar a aclimatarse...

¿Cómo? Cada determinada cantidad de kilómetros, se instalan campamentos base, según el tamaño de la montaña, son el número de campamentos que se instalan y, para acostumbrarse poco a poco a las bajas temperaturas, y acostumbrar al organismo al poco oxígeno, de forma paulatina...

Esta operación la repiten varias veces para ir acostumbrando al cuerpo a la falta de oxígeno y para prevenir lo que se conoce como "el mal de montaña". El mal de montaña consiste en vómito y hemorragia nasal, dolor de cabeza constante, y otros malestares. También te expones a los edemas pulmonares o cerebrales debido a la gran altura.

A veces tienes que avanzar pecho a tierra, porque si no el viento te levantaría como papel...
Caminar 20 Km. para ascender sólo 1,300 mts. Verticales y sientes en tu cara el viento que te quema a más de 100 Km /hr. A temperaturas menores de los 40 °. Mientras luchas por seguir subiendo, durante el ascenso logras ver cadáveres, alpinistas enfermos, heridos, sin brazos, o ciegos, sin dedos porque los han perdido por el congelamiento.

Sabes, que puedes perder la vida, pero conquistar la cima ¡es algo que quieres lograr!
Una vez que llegan al último campamento, descansan en él varios días y tratan de ahorrar la mayor cantidad de energía posible. Cada integrante en una expedición por algunas horas se encuentra dentro de su casa de campaña; la reflexión, la soledad y el aislamiento los rodea, y se encuentran consigo mismo para auto motivarse.

Derriten la nieve para poder tomar agua y nunca se desprenden de sus guantes, sus termales y sus botas. Cuando las montañas son muy altas, como en el caso del Everest, ascender sin oxígeno adicional es suicida, porque en la cima de la montaña sólo el 7% del aire es oxígeno...

Después esperar el momento adecuado, en donde una ventana climatológica te invita a finalizar el reto de la cima y tú, aceptas la invitación, porque ¡ya estás preparado! una "ventana" es un buen día en la montaña con vientos relativamente bajos y poca nevada, es una invitación anónima pasa seguir adelante.La montaña dice no, cuando el objetivo no se alcanza a ver, cuando el cielo no se despeja y está nublado, cuando no pueden dirigir sus pasos por falta de visibilidad, entonces, lo mejor es regresar e intentarlo en otra ocasión.

En conjunto te unes con tus compañeros para el ascenso, tú eres ellos, y ellos son tú, si tú caes, ellos caerán, si eres sacudido por una avalancha, con tu peso arrastrarás a tus compañeros ya que todos van unidos por la misma cuerda; y si pierdes una sola pisada por el cansancio, resbalarás y caerás al abismo.
Para subir a la cumbre salen de madrugada porque deben evitar que el sol derrita la nieve y se provoquen avalanchas. Al alcanzar la cima, únicamente permanecen en ella segundos, disfrutando del momento y de sentirse cerca de Dios. Ahora debes comenzar el descenso, aún no termina el reto... Estás en la cima... Pero el verdadero reto comienza ahora...

Descender sano y salvo... Sin dejarse llevar por la euforia porque, en esas condiciones la muerte, es muy probable si no lo haces instantes después de haber llegado a la cima... Los accidentes de alpinistas suceden durante descenso, ya que la fatiga los vence por haber empleado la mayor parte de su energía en el ascenso.

¿Cuántas veces hemos caído? ¿Cuántas veces dejamos de luchar y nos damos por vencidos?, ¿Cuántas veces queremos tirar la toalla?, ¿Cuántas veces sabemos que pudimos intentarlo, y tuvimos miedo? ¿Cuántas veces dejamos nuestros sueños porque creemos que no se realizarán? ¿Por qué? ¡Sí podemos lograr nuestros objetivos!, estoy convencida de ello... Sólo nos hace faltan ¡ganas! Y prepararnos como los alpinistas, para la lucha diaria de nuestra vida, ¡basta ya de subir peñascos y montañitas!... ¡Conquista la cima de tu propio Everest! y como los alpinistas, el subir no lo es todo, hay que descender con éxito...

¡Que se ahoguen las desgraciadas! 

Han pasado días, años, cargando está maldita y miserable culpa, y ya no quiero sufrir más, quiero encontrar la solución a todo esto, me dije… He llorado tanto… ¡Qué ya ni me acuerdo porque comencé a llorar! No sé si fue un engaño, una traición o el dolor de una pérdida, ya ni me acuerdo, no sé si fue hace días o hace años, no sé si yo fui la traicionada o la que traicionó, he bebido tanto… Quise beber para ocultar el dolor, pues ¿no dicen que el alcohol hace que se olviden las penas? Pues así lo hice yo, me dije, pues bien, te duele hasta el tuétano lo que pasó, pues ¡ándale! ¡Un tequila, pa olvidar! y así lo hice, solo que con un tequila sentía el mismo maldito dolor, ¡va! ¡Qué va a quitar esto las penas! me dije, ¡bueno quizá otro, me dijo mi voz interior! y uno más tomé, pero aún seguían ahí mis penas, no se iban… Pensé, que eso del tequila no había sido buena idea, recapacité, por un momento quise dejarlo… Pero mi voz interior me decía… ¡Acábate la botella! ¿Mi voz interior? ¡Qué va! ¡Más bien mi demonio interior!... Pero sí, sí lo hice, bebí hasta que me acabé la botella, quería ahogar mis penas, ni una gota más salía de ella, solo repetía una y otra vez… ¡Que se ahoguen las desgraciadas!… Lo que si recuerdo es que las malditas penas no se fueron, las desgraciadas ni se ahogaron… ¡Sabían nadar! Así que lo único que me quedó de esta experiencia fue una inolvidable resaca y mi boca reseca, que ni me ayudó a olvidar, ni a mitigar mis heridas, pero si me hizo entender, que eso de tomar una copa dizque para olvidar las penas es una gran mentira… Es lo mismo que pedirle peras al olmo…




¿Cómo terminaste el año?

Sí, es verdad, que conforme pasan los años aprendes, aprendes la mayoría de veces, de las caídas, errores, pérdidas y sufrimientos, y ¡duele!, y ¡te lastima!, y ¡lloras, y gritas!, pero te vuelves ¡fuerte! ¡Imparable! ¡Y crees en ti, cómo nadie!... Y aprendes…
Antes de que terminara el año, reflexioné intensamente en todo lo que había realizado en el transcurso de estos 365 días, y muchas preguntas me hice, y me respondí desde lo más profundo de mi interior, estaba conmigo misma, con los ojos cerrados, para ayudar a abrir mi interior, escuchaba música relajante, ¡tan hermosa! que casi podía escuchar el ritmo de mi corazón, y es ahí, cuándo comencé mi cuestionamiento…
Únicamente yo en la habitación, sin nadie que interrumpiera mis respuestas, mi búsqueda, mis motivos, mi vivir, mi verdad… Sin necesidad de utilizar pretextos, ni disculpas… Y era el momento de abrir mi alma, y de volver a leer, todo lo que en ella había escrito durante el año, borrar lo que no servía, y enfrentar las fallas de un año que me dejó: ¡Enseñanzas enormes!…
¿Cómo fue el año que terminó? ¿Qué mejoré en mi vida diaria? ¿Cumplí mis proyectos? ¿Fui más allá de ellos? ¿Me pedí demasiado? ¿Fui buena hija, hermana, madre? ¿Ayudé al pobre, desvalido, a mis semejantes? ¿Fui buena esposa, amiga, compañera? ¿Realicé bien mi trabajo? ¿Fui demasiado floja, altanera, grosera?...
Y me sentí bien, con mis respuestas, conforme, sé que hubo cosas que salieron de mis manos, pero, ¡di todo de mí! Los proyectos no cumplidos, están ahora esperándome con más fuerza que nunca para comenzar a realizarlos desde hoy, y el libro de mi vida sigue en espera con muchas hojas en blanco, para poder escribir al final de ellas, que realicé muchos de mis proyectos y sueños que se cristalizaron en hechos inolvidables…



¡No te entremetas!

¡Calla! ¡Te he dicho más de mil veces que no intervengas!, ¡que no indagues!, ¡que no supongas! y no quieras llegar hasta el rincón más sutil de ahí dentro, donde tú sólo sabes y tocar las fibras que sangran sin clemencia, que gimen y me utilizan… ¿No ves que lo hechas todo a perder?
¡Calla! ya no me digas más, siempre me utilizas, tratas de embrollarme, de aniquilarme y confundirme cada vez que se te pega la gana, con tus estúpidas y asquerosas teorías, sin ni siquiera tomar en cuenta lo que siento, lo que deseo, lo que ambiciono, lo que apetezco, lo que me hace inmovilizar el estómago y mantenerlo contraído, y el agua salada al borde de los sentidos…
¡Calla! Maldita sea ¡calla! no quiero escuchar el eco de tu frecuencia pidiendo sin concluir a cada minuto, o segundo que transcurre que acepte tus imposiciones, suplicas y me haces caravanas, y reiteradamente realizas ese embustero juego de tu truculento zarandeo ¡exiges demasiado! ¡No te entrometas!...
Te lo he dicho hasta el cansancio, me agotas, me enloqueces, me haces alucinar y vomitar del esfuerzo sobre natural que tengo que hacer para que dejes de estar convulsivo, jadeante y demente… ¿Qué no te das cuenta cuan lacerado, flagelado, y crucificado estás? No me hagas llegar a la conclusión de que te gusta que te ejecuten un y otra vez, que te introduzcan hasta agujas, clavos, dagas, y flechas hasta más allá de lo que cualquiera puede aguantar…
¡Eres necio!, ¡insolente!, ¡impertinente!, ¡idiota! e ¡impúdico! al pedirme de rodillas, suplicándome casi hasta el punto morir que lo acepte, que lo admita, que lo permita, una vez más… ¿Qué no ves que aniquilado estás a punto de caer?
¡Cállate!, ya no más, ya no más, no te permitiré intervenir, porque cada vez que lo consiento, por tu ridícula frecuencia pidiendo sin concluir a cada minuto, o segundo que transcurre que acepte tus imposiciones, porque tú con tus súplicas y tus caravanas, que reiteradamente realizas con ese embustero juego, el truculento zarandeo, y tu tonto palpitar nos hacen agonizar poco a poco sin compasión alguna…


¿Cómo iniciar el año positivamente?

Lo primero que surge en nuestra cabeza, es la duda de cómo prepararse para realizar un mejor año, y a veces te llena de angustia, porque cuando revisas tu inventario o reflexión de cómo has terminado el año anterior, te das cuenta de que muchos de los proyectos que iniciaste no llegaron a un final feliz… Así que, este año has decidido no cometer el mismo error, y comenzar con el pie derecho, pero ahí la duda, ¿cómo iniciar el año positivamente?
Pues bien, hay algunos puntos que yo creo que son importantes:
Primero.-como ya lo dije, hacer un inventario o reflexión de ¿cómo terminaste el año anterior? , es simplemente una guía para ayudarte a realizar tu inventario.
Segundo.- No te culpes, ni te castigues diciéndote palabrotas, ni te cuestiones el porqué no pudiste realizar algún proyecto, recuerda que todo en la vida sucede por algo, y quizá, no era el mejor momento.
Tercero.- Planea, elige el proyecto que deseas realizar, sé claro, conciso, y preciso…
Cuarto.- No decaigas ¡jamás!, aunque veas que las cosas se ponen color de hormiga, sigue adelante, recuerda que es tu proyecto y que quieres realizarlo…
Quinto.- Ten fe, recuerda que la fe mueve montañas, cree en ti sin dudar, nada de pensamientos negativos, ¡ni uno sólo!... No importa si hay alguien que no cree en tu proyecto, basta con que creas ¡tú!... ¡Y cree! Si crees que puedes, ¡podrás!
Comienza por decretar cosas pequeñas, sencillas, y te darás cuenta como se te da todo lo que deseas, como fluye en ti la maravillosa energía positiva, piensa… Reflexiona, ¿qué es lo que más deseas ahora?, ¿quizá un buen empleo? ¿Curarte de alguna enfermedad? ¿Tener prosperidad económica? ¿Aliviarte de alguna pena? ¿Qué es lo que deseas?
¿Ya lo tienes? ¿Estás seguro de que eso deseas? Ahora, visualiza tu sueño, míralo, huélelo, disfrútalo, imagina como te ves cuando lo has logrado, imagina tu cara de satisfacción, la admiración de los demás, imagina todo lo que tu proyecto genera en tu familia, en tus amigos, en ti, vívelo…
Al levantarte por la mañana, recuerda tu proyecto paso a paso, todos los días, y repite en presente afirmaciones que te ayuden a generar esa energía positiva, las afirmaciones son una herramienta magnífica, porque trabaja ayudándonos desde adentro y sacando de nuestra mente esas ideas equivocadas que hemos ido metiendo por tanto tiempo.
Las afirmaciones positivas crean fuertes vibraciones de energía, energía que viaja al Universo para manifestar tus deseos, proyectos, sueños, permitiéndote que tus objetivos se cumplan con éxito, son especialmente poderosas cuando tu mente está serena y concentrada en el punto.
Una afirmación es un deseo, proyecto, sueño o pensamiento positivo que escoges conscientemente para instalarlo en tu conciencia y así crear los resultados que deseas… Y podrás alcanzar cualquier sueño, sí le das la oportunidad y oras con fe y serenidad.
Poco a poco irás aprendiendo a realizar afirmaciones positivas, cuando las hagas siempre decreta en presente, en primera persona, aquí, ahora y para siempre, no tengas miedo a pedir, la energía maravillosa de Dios padre, el Universo, la vida, te lo dará…
Observa cuántas veces en el día dices no, y cambia toda la frase que pensaste por afirmativa, prepara a tu mente, empieza por aceptarte, amarte, y perdonarte, Y siempre, agradece y comparte lo que se te ha dado, lo demás… Lo demás viene por añadidura…
Te dejo algunas afirmaciones positivas que creo que serían las más adecuadas y sencillas por ser quizá la primera vez que las realices, tú las puedes cambiar por las que más deseas o te convengan, y poco a poco, si tu así lo quieres te enviaré más afirmaciones para la salud, abundancia, amor, perdón, etc.
“Me amo y me estimo tal como soy”
“Atraigo hacia mí y a mi vida relaciones de amor, satisfacción y de felicidad”
“Soy un canal abierto de energía creadora”
“Siempre estoy en el lugar preciso, en el momento oportuno, realizando con éxito lo que hay que hacer”
“El Universo es rico y hay bastante para todos”
“Cristo que está conmigo, obra milagros en mi vida aquí y ahora”
“La luz de Dios me rodea, el amor de Dios hace que me desarrolle. El poder de Dios fluye por mí. Donde quiera que esté, Dios está conmigo y todo fluye positivamente”
“Merezco el amor y el placer sexual”
“Hoy todo lo que toco tiene éxito”
“Hoy elijo atraer la prosperidad”





Cuando uno está dispuesto a esperar el amor...


Puebla, Pue; Junio 2014
Carta sin número



No sabía si escribirte o no... Es algo que no puedo dejar de hacer, lo intento, pero siempre en mi cabeza merodean las letras insistentes en expresar mis sentimientos... No puedo dejarlos aprisionados en el fondo de mi ser, ¡no debo! Esto que siento no puedo tenerlo dentro, y prefiero escribirlo, porque la verdad, soy incapaz de externarlo en tu presencia, ¡no quiero!



Prefiero callarlo, porque tengo miedo, tengo miedo que en mi forma de mirarte, de besarte, de hablarte, descubras esto que comienzo a sentir, se me desbordan los sentimientos como una gran cascada que choca impetuosa en el corazón sin poder salir, y ¿cómo no comenzar a sentir esto? ¿cómo? si cada día que ha pasado te has encargado de ser especial en mi vida, y realmente no sé qué es, siento un placer indescriptible del tiempo que hemos compartido, de lo que nos hemos confesado, de lo que hemos reído, no sé si es ese sentimiento llamado amor, que comienza asomarse sigilosamente en las puertas de mi alma, no sé si me estoy comenzando a enamorar, esa química de la que tantas personas hablan, esa chispa que comienza a encenderse sutilmente en espera que el aire sople a su favor... Y encenderse poco a poco, hasta que las almas se fundan en una sola...



Hace tanto que no tenía este sentimiento que realmente es muy difícil entenderlo, el razonamiento se interpone ante el sentimiento y busco mil excusas para decirme que no es lo que creo, que es demasiado pronto, ¿pronto? ¡Qué va! a esto que siento, de ninguna manera he podido ni querido ponerle límites, estoy plenamente consciente de los cambios y emociones que en mí se manifiestan, pero nada en esta vida es para siempre, nada en esta vida es seguro, y quiero arriesgar, arriesgar porque quizá tú no sientas esto, pero mientras llega el momento de descubrirlo sí, sí quiero arriesgarme ¿no la vida es para disfrutarse? ¡Quiero hacerlo!



Disfrutar cada momento que tenga contigo al máximo, mirar cada gesto de tu cara, esa curva de tu sonrisa ¡que me encanta!, tus ojos expresivos, tu paz, escuchar tus anécdotas, tus consejos, sentir tus manos ásperas sobre la mías acariciándome, reírnos, escucharte cantar parte de una canción mientras estamos juntos, mirar como mueves tus dedos golpeando suavemente uno por uno mientras esperas algo, disfrutar las pláticas sobre tu trabajo, sobre tu vida, de lo que te gusta, cada segundo, cada minuto, deseo disfrutarte en plena consciencia, cuando uno es joven, suele ser inconsciente, y a veces el tiempo se vive rápidamente sin darse cuenta de los detalles maravillosas que tiene la vida, ahora, hoy en día, quiero pedirle tiempo al tiempo, para que me deje disfrutar a plenitud de tu presencia...



No sé cuánto tiempo me quede, no sé cuánto tiempo te pueda disfrutar, y darte todo el amor que tengo dentro de mí, sólo sé que sí estás en mi vida es por alguna razón, y haré todo por día a día hacer florecer todo esto que siento, llegaste en el momento justo, y cuando tus ojos por primera vez se clavaron en los míos, me hicieron estallar, me hicieron sentir, me hicieron vibrar como hace mucho no me sentía, y eso... Eso no se siente todos los días...
No sabía si escribirte o no...
 


Amarte significa...
Amarte significa  que te acepto como eres y que no deseo cambiar nada de ti; te amo porque escuchas sin juzgar;  porque eres tierno y cariñoso; porque me aceptas como soy; porque hiciste un espacio en tu vida y corazón para brindármelo a mí...
Porque me aconsejas y comprendes, porque haces que  pase momentos muy felices cuando estamos juntos, por tu gran sentido del humor, porque me brindas confianza y cuidas de mí; porque hiciste que volviera a sentir y creer en la capacidad de amar, porque hiciste que redescubriera mi intimidad...
Siento tantas cosas que ya no encuentro palabras nuevas que expresen un significado especial para "un  te amo" no hay palabras viejas aún escudriñando entre diccionarios para decir de manera diferente lo que me haces sentir;  me haces crecer y reflexionar; al amarte; tienes mi admiración agradecimiento, y respeto; tienes mi confianza; y cada parte de mí cree en ti...
Sólo sé que por algo estoy en tu vida; por algo estás en la mía; estoy feliz de sentir en mi alma este amor que se manifiesta de todas las maneras posibles... Me hace sentir grande; auténtica; llena de vida..
Estoy segura que te he hecho feliz; que te he transmitido mi amor; ¡que lo has sentido! Porque en cada parte de mí; hay una entrega llena de pasión y de amor; en cada mirada; en cada palabra; en cada verso; en cada sonrisa; en cada caricia...
No sé sí te sientes igual que yo, pero estoy segura que soy especial para ti... De esa manera amor mío; comenzó este amor que hoy siento por ti... Mi amor por ti es de espacios llenos de felicidad, sin preguntas, sin complicaciones; así, respetando tus espacios... Sin ataduras que alejen... Así te acepto; con tu vida hecha; con tus costumbres; con tus defectos; con tus manías; con tus acuerdos ¡eso es amor!
Sí soy correspondida, agradeceré a Dios por darme la oportunidad de volver a sentirme amada; de vivir en plenitud y conscientemente el amor... Y juntos hacer que perdure el sentimiento...
Pero sí es al contrario; sí no me amaras; ¡tranquilo amor mío! que de amor no ha muerto nadie; siempre estaré agradecida de haberte conocido y de saber que hubo alguien que pudo reinventar el amor para un corazón roto...
Seguramente no será nada fácil porque quizás decida alejarme de ti...  Tampoco puedo quedarme al lado de quien no me ama... Yo creo que el amor simplemente se siente y no necesita razonarse ni pensarse... Eso se hace cuando un corazón ha sido herido; asfixiado; confundido...  O cuando ha estado en un amor mal entendido y manipulado...
Te pido que no antepongas la razón; que no te abstengas del sentimiento; que sí tienes el impulso de llamarme ¡hazlo!  Deja  que el sentimiento fluya...



Todos los derechos reservados©
Magali Sauceda
Julio 2014





Escibirte

Amor... No puedo dejar de escribir para ti; mi corazón dicta rápidamente; y desea escribir tu nombre mil veces; y pienso en ti, en las cosas que me haces sentir; las mariposas no sólo están en mi estómago están haciendo nido y se reproducen rápidamente; las siento por todo el cuerpo; me concentro y me doy cuenta que me estremezco tan sólo al pronunciar tu nombre...
(Manny)
Junio 2014





 PASADO
Ya no escribiré más poemas ni versos para ti, no escribiré mis letras;
ni un sólo pensamiento, ni una coma; ni un soneto, ni una décima; ni un sentimiento...
No escribiré nada más, y no te estoy mintiendo, no te dedicaré una carta;
eso te lo prometo...Ya no eres mi presente;
sólo un recuerdo...
Sólo el pasado obsoleto...
El que no regresa, el que está en silencio...

Julio 2014




Recuerdos....
Me gusta recargarme en tu hombro cuando terminamos extasiados de hacernos el amor; me siento impregnada de ti; de tu ser; y recuerdo una y otra vez todo lo que me dices mientras acaricias mi cuerpo y me llenas de besos; y te deleitas saboreando mis pechos...
Sientes como tiemblo y me estremezco entre tus brazos; siento suavemente el rozar de tu lengua en mi intimidad que se desborda como manantial en espera de  convertirse en una cascada, tus dedos buscan hacerme sentir más placer y me preguntas sí disfruto, y ¡es tan grande lo que siento! ¡que lloro y río;! ¡Y grito! ¡Y tiemblo!; ¡y deseo que se prolongue ese momento porque me haces tocar el cielo!...
¡Deseo hacerte sentir! ¡el placer que tú me haces vivir!; ¡deseo hacerte temblar como tú me haces temblar!.... ¡Quiero devorarte  con todos mis sentidos!; beber de tu dulce néctar mientras araño tu espalda...
Mientras me abrazas excitado y me susurras cosas que me hacen vibrar; deseo que me vuelvas hacer tuya una y otra vez, mientras me abrazas y musitas mi nombre diciéndome que me amas...

(Manny)
Todos los derechos reservados©
Magali Sauceda
Julio 2014




Desnudando el alma para un reencuentro con Dios...
Escribiendo confesiones...

Supongo que en este momento estarás total mente abatido, ¿preguntándote que va a pasar ahora? Preguntándote ¿qué haces ahí?… Déjate guiar, no te preguntes nada, yo estoy ahí estoy a tu lado… Como siempre una vez más… Y justo ahora, rezo por ti, porque llegues a término de este momento tan duro… Sé lo que sientes, ¡lo sé!

Pon todo en manos de Dios, ¡no tengas miedo!
Encontrarás muchos porqués, encontrarás la raíz de tus miedos, la raíz de tus angustias, y por primera vez te sentirás libre, libre de culpa, de cualquiera que esta sea… ¡Escribe todo! ¡Lo más íntimo que salga de tu ser!, todo lo que te aprisione el alma, los sentidos, los poros, ¡la vida! ¡Escribe! ¡Saca todo aquello que te quema, que te pudre, que te lastima! Desahoga todo aquello que por años no has podido sacar…

En medida que lo hagas será la liberación de tus miedos, será la liberación de tus culpas y de todo aquello que te aniquile el alma…
Es duro el camino aún, ¡muy duro!… Pero si trabajas con el corazón, y eres honesto, ¡pronto terminará!… Yo sé que deseas libérate de todo aquello que te aprisiona, para poder ser un hombre sin miedos, fuerte, seguro, para enfrentar los obstáculos de la vida...

Después de esto, hallarás la luz que necesitas para tu vida… Hallarás una paz infinita… Y entonces, aprenderás a mirar la vida con otros colores… Y nunca más te volverás a sentir vacío como muchas veces te has sentido, no tendrás que llenar tus vacíos con cosas negativas…

Sólo con el espíritu de Dios te habrás de llenar... Encontrarás regalos maravillosos… ¡ya lo verás! ¡Confía en Dios!…

¡Ten fe verdadera!
Ya platicaremos a tu regreso, te quiero mucho, hoy y siempre serás el amor de mi vida.

Con mucho amor, Magali.


Mayo del 2013




Nadie como tú
Eres como ningún otro, porque sólo tú te has ganado mi alma y un lugar en lo más profundo de mi corazón, sé que tu amor lo puede todo, las noches estrelladas, las melodías más bellas, las palabras, las fantasías, todo me parece poco, porque tú me llenas. Eres mi sueño cumplido, el amor perfecto, sin ataduras. Eres la respuesta a mis preguntas la razón de mi vivir. De soñar, de llorar, de reír, de amar, cantar, de escribir… Le agradezco a Dios que te haya puesto en mi camino, quisiera gritar desde lo más alto de una montaña que ¡te amo! Y que se escuchara el eco por todos los cielos…

Porque tú siempre estás en mis pensamientos, en mi corazón, en mis sentimientos en el sol, la lluvia, en cada lágrima, tú eres mi felicidad, mi todo. Porque desde aquel día en que te vi por vez primera mi vida cambio por completo. Sólo le pido a Dios que perdure este amor más allá de los años, del tiempo, de la muerte, para estar a tu lado ¡siempre! Con todo mi amor...


A ti, mi vida...
Es sumamente difícil estar separados de esta forma, siento que es demasiado ¡para mí! Trato de mantener una relación firme basada en el amor... Aun cuando estemos lejos... Diariamente me digo "falta un día menos” para volver a ver tu rostro adorado, escucharé tu voz, y sentir tus caricias, pero ese mañana aún no llega, y aún seguimos separados... Este dolor siento que me carcome el alma, aunque sé que debo ser fuerte en este momento siento que no puedo más... Mis lágrimas no me dejan ni respirar, y siento que me ahogo, me haces tanta falta...

Jamás imaginé que estaríamos separados de esta forma, lo único que me alimenta y me mantiene erguida, es saber que nuestro amor nos mantiene unidos... Sé que cuando me llamas, te haces el fuerte, y con tu voz quebrada me dices que no ves el momento de tenerme entre tus brazos; que me extrañas... Y que no puedes más... Entonces, no sé dé donde saco fuerza, y te pido que te calmes, que hoy falta un día menos para volvernos a ver, que todo estará bien... Aunque mis lágrimas no dejan de rodar por mis mejillas, al colgar el teléfono, tomo tu camisa, el abrazo fuerte, pues aún tiene tu aroma, y te siento tan cerca de mí...

Leo una y otra vez la carta que me escribiste antes de que partieras, en donde me dices que siempre estoy en tu pensamiento, que me amas, y que desde ese momento ya me extrañas, y ya está toda arrugada, y llena de lágrimas como si tuviera años, y sólo tenemos dos meses separados... Sólo espero que pasen los días pronto, para volverte a ver... Siempre tuya...


Te fui infiel...
Amor, te pido te compadezcas de mí, y me permitas pedirte perdón de corazón, me siento atormentada porque equivoqué el camino Porque me doy cuenta de que he hecho mal... te fui infiel... Fue una locura... El llanto no me deja respirar... Me siento avergonzada de lo que he hecho, y quizás después de esto... No quieras volver a verme... Porque sé que arrancarás de tu corazón las raíces de tu amor por mí… No quisiera decirte lo que ha pasado...

Me dejabas tanto tiempo sola, que confundí las cosas, ahora me doy cuenta que te amo que el tiempo que estabas fuera era para darme lo mejor... Y te pagué buscando la oportunidad para buscar que alguien me estremeciera como tú... Y me equivoqué, me equivoqué porque lo que sentí fue asco, y vergüenza al envolverme en una situación que sólo me dejaría el más profundo dolor al haberte engañado ¡lo siento!... Sé que te perderé...

Sé que sin ti no habrá vida, no habrá luz en mi camino... No habrá nada que pueda sanar este dolor que siento... Jamás pensé que una infidelidad fuera una traición a una misma, ahora lo sé... Y me siento arrepentida... Quizás cuando leas estas líneas, ya esté muy lejos de tu vida... Quizás nunca me perdones, y lo entiendo... Es por eso por lo que me marcho...


Ya no me digas...
Ninguna de tus palabras hará que pueda olvidarme de daño que me hiciste, no me digas que lo sientes... Porque sólo me lastimas más, ¡sé que me fallaste!, ya no eres aquel hombre de quien me enamoré perdidamente, que me hacía sentir la más dichosa de las mujeres, no mereces mi perdón, no mereces que te siga amando, y sin embargo no puedo dejar de amarte, pero él no dejar de amarte no quiere decir "esperanza"… No me digas que me necesitas...

 Te olvidaste de mí y no me necesitaste cuando dejaste abierta la puerta de tu alma para que entrara otra persona en tu vida... Y no sólo me has destruido a mí, sino a ti mismo... ¡No me digas que no me quieres perder! ¡Que no me puedes perder! Porque desde el mismo momento en que dejaste entreabierta la puerta de tu corazón, para sentir una pasión que no era la mía, y que no tenía nada que ver con nosotros... ¡Me perdiste!...

¡Ni me digas que te volverás loco!, ¡loco estabas desde que el pensamiento lo pusiste lejos de mí!, de lo que habíamos forjado juntos, ya no me digas más que nuestro amor es fuerte y verdadero, tú lo convertiste en un amor débil y de mentiras... No me digas que ese amor nos dará fuerza para seguir adelante... Porque mi vida la ¡has destrozado!




Agradezco tu paciencia
Mi amor, gracias por entenderme, perdóname por este mal humor que a veces tengo... ¿Sabes?... hago grandes esfuerzos, pero algunas veces mi mal humor me gana la partida... Me dé muchísima tristeza que eso pase, a veces me da rabia, porque pienso que tú debes entenderme y ayudarme, pero sé que no puedes entenderme cuando grito, no puedes ayudarme si no te lo permito...

Algunas veces siento deseos de llorar sin razón, me doy cuenta de que esto es tan difícil de entender, pero es la manera de liberarme de toda la rabia, los agravios y las frustraciones que llevo por dentro. Permito que las cosas a mí alrededor influyan en mi manera de actuar: Dejo entrar el pasado, que tanto me lástima... Y mis sentimientos de entonces los dejo enredarse con mis sentimientos presentes...

Creo que esto ha sucedido algunas otras veces, y sé que esto te hiere, pero sé que también me ha ayudado esta rabia, aprender a vivir... Gracias por entender mi silencio... Por ser paciente cuando mis acciones te llenan de frustración, porque sin ti mi vida sería incompleta, no importa lo que pase... Siempre recuerda que te amo...


Qué me gusta de ti...
Tu seguridad y fortaleza para enfrentar problemas, incluyendo tu capacidad física, la manera en que tienes de ver la vida de manera práctica y sencilla, y el asombro que muestras con una pequeña flor. Tu valor para afrontar las situaciones que se presentan a cada momento, tu aplomo cuando te relacionas con la gente, tu simpatía, tu carisma para con la gente que te rodea, tus sentimientos nobles, la compasión, el amor entregado todo de ti.

Como administras el hogar, como te preocupas por mantener siempre la casa limpia y en orden, como atiendes a nuestros hijos, que siempre tienes el afán de mejorar en la manera de educarlos y me empujas a hacer lo mismo, ese deseo de que yo participe activamente, tu buen gusto para vestir, para arreglarte, perfumarte, maquillarte arreglar tus cabellos y tus uñas... Me gusta tu olor, tus aromas más íntimos, me gusta tu boca sensual, carnosa, bien definida, más cuando sonríes...

El color de tus ojos, la expresión de tu mirada, tus senos, aunque pequeños pero son suaves tersos y acariciables, como dos duraznos en plena madurez, me encantan tus caderas, la suavidad y la perfección de tus piernas, tus pies pequeños... Me gusta cuando me haces el amor porque eres apasionada, eres sensual, original, cautivadora, me haces sentir que estoy en la cima del cielo… Al hacer el amor parece que bailas una danza sensual, siempre a un ritmo perfecto, como una pieza clásica de Mozart, perfectamente sincronizada, como medida con metrónomo, me gusta que siempre me apoyas en todo, me alientas a seguir adelante en mi trabajo, mis proyectos, mis sueños…

Tú eres mi motor, mi timón, mi balsa de salvación, me gusta que me cuides cuando estoy enfermo que me mimes y te preocupes por mí, eres muy sensible, entiendes perfectamente el lenguaje del amor, ya sea entre pareja con los hijos con los padres con los amigos o hermanos, lo que escribes... Tú tienes el don de entender mi corazón… ¡Te amo mi vida!


Tu amor...
No existe algo más hermoso dentro de mi corazón que el regalo de tu amor. Y es que el amor que siempre me ofreces, hace un mundo de magia, donde los sueños e ilusiones se hacen realidad. No cambiaría nada de lo que hemos vivido y sufrido porque nos ha hecho fuertes nos ha permitido y ha hecho que nos veamos las almas desnudas. Lo nuestro es indescriptible, es sincero, único... Me doy cuenta que no nos equivocamos... Al entrelazar nuestras vidas. Gracias por crear algo tan hermoso en mi alma, por estar siempre presente. Por darme día a día un significado para seguir viviendo…


Te oigo y te amo

Son ya mil momentos de amor los que hemos compartido, son mil instantes juntos y muchas palabras las que nos hemos dicho con música del corazón, lo que sentimos. Quizás jamás dejemos de decirnos lo que nos queremos, lo que nos amamos, lo que esperamos, el amor es así, ¡nunca aparece el cansancio!, nunca dejamos de producir magia con sentimientos. Y ¡yo quiero que siga así!, porque con cada palabra, con cada sílaba, con cada sonido que sale de tus labios me estremezco, y aunque ya conozca tu voz -como no conocerla si es lo único que quiero escuchar- , cada vez que te escucho vuelvo a temblar y me vuelvo a enamorar de ti una y mil veces.

Cuando no estás, te oigo, cuando estás te admiro, cuando no estás te siento, cuando estás te quiero abrazar. Recítame tus poemas, tus pensamientos, que una cosa es escribir, otra escucharlos de tus labios, quiero escucharte susurrándome al oído cuanto me quieres, recítame tus anhelos, lo que esperas de mí, lo que sueñas, procuraré meterme en tus sueños y en tus pensamientos, cumplir tus esperanzas y estar ahí cada instante. Te quiero seguir oyendo, sumando los sonidos, guardando tus palabras en mis sentimientos, obedeciendo fielmente con amor tus anhelos.

Te quiero seguir escuchando, cuando le hago olvido el mundo, olvido las penas, olvido hasta el olvido. Me despido de ti, no sin antes decirte que ahora no te oigo, pero miento, grabé tus palabras diciéndome que me amas y por eso la sonrisa se quedó perenne en mí. Deseo que llegue el momento de volvértelo a escuchar, porque tus: "te amo", son mi fuerza de vivir… ¡Te oigo!, ¡te amo!



Para mi gran amor...

Mi vida, te amo desde el primer momento que te conocí, y mucho más, más ahora, porque el camino que hemos recorrido me ha unido tanto a ti... A través de nuestra vida juntos, ha habido tantos logros, satisfacciones y hechos inolvidables, que han minimizado las cosas difíciles porque siempre juntos hemos recogido los pedazos de sueños rotos para crear nuevos. Te amo por tu paciencia, por tu comprensión, por el calor de tus brazos que me recuerda donde está mi refugio, mi hogar, mi pasión...

Te amo porque me diste la libertad para que descubriera lo que más valoro en ti. Te amo porque me has dado fortaleza cuando mi corazón ha estado a punto de desfallecer, y me has dado en ese momento lo que más necesitaba... ¡Seguridad! ¡Para atreverme a volar! Te amo, por la forma en que me haces sentir amada... Porque tú has sido la maravillosa persona que me ha enseñado todas las oportunidades que tiene la vida


Cartas para dos amores

Amor mío, hemos pasado momentos maravillosos. Desde que te conocí supe que éramos uno para el otro, es increíble lo que me has hecho sentir, lo que hemos aprendido juntos a través del tiempo. Admiro tu fortaleza para enfrentar los problemas, la manera práctica y sencilla que tienes de ver la vida, tu valor para enfrentar las situaciones difíciles, tu aplomo para relacionarte con los demás, tan seguro de ti mismo siempre, tu simpatía, tu carisma con la gente que te rodea, la delicadeza que tienes para besarme, la protección que siento cuando me envuelves en tus brazos, diciéndome "mi chiquita".

Siempre tienes una palabra de aliento y amor para mí, ¡eres maravillosas! eres el gran bálsamo que cura mis heridas y envuelve mis tristezas, la manera en que me haces el amor... Me hace tocar las estrellas, porque sé que me amas tanto como yo, tu forma de susurrarme al oído "te amo", ¡me haces sentir plena y feliz! Y no dejo de agradecerle a Dios que me haya permitido formar parte de tu vida, y es por eso por lo que sé que él nos ha mandado el regalo más grande...

Papá: Quiero decirte, que apenas empiezo a crecer dentro de mamá, soy tan pequeñito que aún no puedo escuchar con claridad tu voz, ¡pero sé que estas allí!, siempre junto a mamá protegiéndola y cuidándola, en espera de saber cuándo llegaré a este mundo... ¿Y sabes papá? ¡Estoy feliz! Porque mi mamá me protege dentro de ella con la más grande ternura que hay sobre la tierra. ¿Sabes? ella me ha dicho lo grande que eres... ¡Todo lo que significas para ella!, Y ríe y llora al quererte dar la noticia de que vengo en camino, y la miras con tanta ternura al ver como ríe y llora, y preguntas ¿qué pasa? y yo siento como le cosquillea el alma al tratar de decírtelo, ¡al fin lo logra! la abrazas, lloras, te hincas a su lado, le besas el vientre... ¡Le das gracias a Dios...! ¡Ya quiero nacer! ¡gracias por darme la vida!


Corazón...

Cada vez que late mi corazón palpita tu nombre en mi alma, mi cuerpo, mis sentimientos, mi espacio... Te encuentras presente tú en cada lágrima, en cada sonrisa, se encuentra tu esencia. Tú has logrado convertir en realidad, todas aquellas cosas que he visto en cuentos de hadas, has logrado desvanecer en mí, todos aquellos momentos de tristeza, haciendo que perdure en mí la felicidad eterna...

Me has llevado al final del arco iris, llenando mi vida de colores maravillosos, y me has mostrado el ser maravilloso que eres abriéndome las puertas de tu alma para que sólo yo entre y permanezca ahí, hasta el final de nuestros días... Y más allá porque mi corazón te pertenece. Siempre tuya...



Para ti mi chiquita...

Mi amor, me gusta que sonrías cuando estás feliz, yo también lo estoy, porque con una sonrisa iluminas todo a tu al rededor, pero cuando una lágrima recorre tu mejilla yo la beso con ternura, como queriéndome beber tus amarguras y haciendo míos tus sentimientos... Quiero darte todo y a veces siento que no puedo darte más ya te entregué mi vida al amarte, es toda tuya, recíbela mi amor, que si no lo haces... Yo me quedo vacío...

¡Estamos embarazados! Mi querido amor, todos los momentos que he pasado a tu lado desde el día que te conocí han sido inolvidables, hemos compartido infinidad de alegrías, a tu lado me sentía plena, completa, no había nada que empañara nuestra felicidad, el día que me pediste que aceptara ser tu esposa fue la más hermosa de tus ¡locuras! El camino lleno de pétalos de rosas rojas desde el estacionamiento del restaurante hasta la mesa que habíamos asignado para cenar, la cena exquisita y romántica ya era entonces ¡inolvidable!

El mesero se acercó a servir el champaña, fue cuando entonces dijiste: ¡Brindemos! Y yo pensando conmovida que era, porque cumplíamos un año de novios, alcé mi copa, de pronto llegó un payaso, que sorprendió a todos con su inconfundible carcajada, y al sacar de su sombrero una hermosa y gigantesca rosa roja, y en medio de ella ¡un anillo precioso! Me lo puso en mi mano… Y entonces dijiste: ¡Brindemos por nuestro amor! ¿Quieres ser mi esposa? Formar parte de mi vida por siempre, hasta que estemos viejitos…

¿Tener nuestros hijos y amarnos locamente? ¡Entonces te dije que sí! Abrazándome a tu cuello y sellando nuestro amor con un beso… Al fin llegó el día, nuestra boda fue una maravilla, tanta gente que nos ama compartía nuestra alegría, abrazos, brindis, risas, baile, todo estaba lleno de felicidad, era increíble asimilar que tan hermoso era todo aquello, me sentía en cuento de hadas… Tres años de casados llevábamos entonces cuando decidimos tener nuestro primer hijo...

Y después de varios intentos empezamos a preocuparnos porque no había noticia alguna de la llegada de nuestro angelito, hasta que después de un largo año, ¡estudios, medicinas, hospitales! Todo aquello que con gusto pasé por que fuéramos padres, llegó el momento más doloroso de mi existencia cuando el Dr. Dijo entonces: ¡Jamás podrá ser madre! Mis ojos se llenaron de lágrimas y tu conmovido me abrazaste, jamás hubo un reproche, ni uno sólo al contrario fuiste comprensivo y amoroso, jamás me culpaste, y por eso hoy te amo más que nunca, ¡y sé que Dios es grande! Y hoy amor mío te digo que todo nuestro amor, Dios lo eligió para que el día de hoy me hiciera tan feliz como el día que nos casamos, porque sí existen los milagros amor, sí existen…

¡Estamos embarazados! Ya tengo 3 meses, y nuestro hijo pronto nacerá, los doctores no se explican el milagro, el milagro ha sido nuestro amor… Nuestro hijo está en las mejores condiciones, nacerá sano, y por eso amor mío, hoy y siempre te diré te amo, gracias por formar parte de mi vida…


¡Cásate conmigo!

Amor mío... Cuando pienso en cómo decirte cuanto te amo, no encuentro palabras que definan mi sentimiento, el amor es tan complejo, me pregunto cómo puedes sentir tanto, y expresarlo en una palabra tan pequeña, y que encierra tantas cosas... No sabes cuánto te amo, no hay nada que siquiera me atreva a comparar con la felicidad que siento cuando estoy a tu lado, la puesta más hermosa de Sol se me hace poca si tú no estás junto a mí para admirarla...

Cada día que pasa me es más difícil vivirla sin ti, cada segundo, porque desde el momento que te conocí empezaste a formar parte de mi vida, mis pensamientos, mi memoria, mi cuerpo, mi cabeza, todo yo, están llenos de ti, de tu dulzura, de tu comprensión, de tu amor... ¡Eres mi corazón entero! Cuando pienso en ti... Me convierto en un apasionado romántico del amor, y mis lágrimas ruedan por mis mejillas, y lloro por lo que has transformado en mí...

Sé que mi porvenir a tu lado será maravilloso porque estarás tú conmigo para compartirlo... No imagino la vida sin ti... Te amo mi querido amor. Doy gracias a Dios por haberte puesto en mi camino encendiendo esto que siento por ti, avivando la llama de mi amor por ti, porque sólo tú has hecho que pronuncie un te amo salido del alma... Amor mío ¡Cásate conmigo!, y déjame pronunciar desde el fondo de mi alma que prometo amarte, respetarte, serte fiel, ¡y comprenderte por todo lo que me reste de vida!


Gracias por tu mano amiga...

A tu lado no hay momento para sentirme triste o sola... Siempre tienes el consejo, la chispa, el chiste, y el ingenio perfecto para hacer sentir bien a cualquiera, te admiro por tu capacidad de hacer amigos... Por tu carácter alegre, por tu franqueza y sinceridad, sin que por ello, hieras los sentimientos de los que somos tus amigos...Y hoy quiero agradecerte el que me hayas brindado tu mano amiga... No hay palabras que describan todo lo que aprendí y sigo aprendiendo a tu lado... Sólo sé, que mi vida se transformó, al conocer una persona tan excepcional como tú... ¡Gracias por tu mano amiga!


Confesión

Quiero hacerte una confesión... Y cuándo lo haga, sé que acabaré por perderte totalmente... Y digo totalmente, porque jamás has sido mío... Sólo parte de ti... Me pertenece... Sé que ni siquiera lo imaginas, este amor que llevo dentro siento que me ahoga. ¡No puedo más! Te he ocultado por tanto tiempo que te amo... Tratando de no mirarte a los ojos por temor a ser descubierta, por temor a que una lágrima se desvaneciera...

Y te dieras cuenta de lo siento por ti... Mil veces me pregunté cómo podía haber sucedido, ni yo misma lo sé, tus palabras alentadoras cuando me atormentaba la tristeza, tu cariño incondicional, tu sentido del humor, tus abrazos... Tus valores, todo tú... Me hicieron enamorarme poco a poco de ti... Y ¿quién no? si eres una persona encantadora... ¡Cómo pocas!... La convivencia diaria... Las horas inolvidables que pasamos juntos y todo lo que hemos compartido durante tanto tiempo, hicieron que la amistad creciera más allá... Convirtiéndote en un todo para mí... Eres la luz que con destellos de la más bella aurora iluminas mi vida mi vida... No espero nada...

 Sólo necesitaba decírtelo, porque no puedo más... Con cada una de las palabras plasmadas en esta carta... Ha sangrado mi corazón hasta quedarse vacío... No hay nada más que hacer, sino esperar al olvido... Pasará mucho tiempo antes de que vuelva a amar a alguien como te amo a ti, y lo más triste es que tú... Mi mejor amigo, ya no estarás más ahí... Para darme la mano al haber caído... Quizás después de hoy... Ya no quieras verme más, porque no sabrás cómo reaccionar... Te conozco demasiado bien... No ¡importa!... Ya todo está dicho...


Últimamente extraño tus caricias

Últimamente extraño tus caricias, últimamente son más los reproches que los besos. En el tren de nuestras vidas el viaje ha sido largo, muy largo, el paisaje diferente en cada lugar, a veces un verde prado, otras, una oscuridad inescrutable, momentos de incertidumbre y otros de una belleza indescriptible. Tomar ese rumbo ha sido tu elección, a veces mi elección, algunas otras de los dos pero ¡cómo a veces cuesta decidir a donde ir!

A veces nos alejamos y otras no podemos estar más cerca porque nos fundiríamos en un abrazo candente, en un beso y muchas caricias, en esos momentos no siento que pase el tiempo, ni que el tren camine, parece que se ha detenido, no hay ruidos ni murmullo de la gente… Sólo te oigo a ti susurrándome al oído: "Te quiero, te necesito", pero son momentos fugaces, efímeros, sutiles, que se van como se va la noche o como se va el día. A veces la culpa pesa como una piedra en la espalda, como si cargara todas las culpas del mundo, como si no terminara nunca, como el horizonte.

Últimamente extraño tus caricias, no sé si necesito más o me das menos, pero las extraño, ¿cómo convencerte de que mi culpa la he pagado?, de que no quiero más pensar en el pasado, porque pesa, pesa mucho. ¿Por qué no tomamos tú y yo un rumbo diferente en este tren de la vida? ¡Por favor!, ya no sigamos hacía el norte, que por ahí hace cada vez más frío.

Regresemos hacia el cálido sur, donde hay ríos, montañas, lagos, mares y playas maravillosas, depende de decidir, ¿Quieres corregir el rumbo? Sólo basta con decirle al conductor: ¡Espere!, estamos equivocándonos, vamos para el sur, no siga, decidimos corregir, ¡por favor...! Últimamente extraño tus caricias, pero ya no, porque iremos por otro camino, donde nos espera la felicidad completa, donde nuestros sueños se unen, donde no te extrañe más y nos fundamos en un abrazo como el cristal soplado que se une con el fuego de nuestro amor, así es como quiero estar, ahí es donde quiero dirigirme. ¿Vamos juntos?
Siempre tuyo Tu Flaco


Sé que últimamente extrañas mis caricias…

Sé que últimamente extrañas mis caricias, perdóname, perdóname mi amor, no sé qué me ha pasado, siento tanto miedo de amarte, de tenerte, de sentirte, de dejarte u olvidarte... ¡Pero no dudes más!, de que ¡te amo!, no vuelvas a dudarlo, ¡tus palabras suenan como martillazos en mis oídos!, siento enloquecer cuando escucho decirte que dudas de mi amor, que son momentos fugaces, efímeros, y sutiles cuando me escuchas decirlo...

Porque yo quería que se quedara eternamente en tu memoria. No quiero más oírte decir que extrañas mis caricias... ¡Por qué me lastimas!... No sé cómo sucedió, no sé ni cuando, ni dónde, ni cómo dejé de expresarte mi amor... Han sido tantas las discusiones, los desacuerdos, y los problemas, porque no hemos dicho lo que sentimos, lo que queremos, lo que deseamos en el momento preciso… Eso ha hecho que mi amor se vaya cubriendo de una espesa neblina, que no me deja llegar a ti, ni verte, ni abrazarte, ni besarte, ni mirarte reflejándome en tus ojos, y ¡quiero hacerlo! ¡Pero no sé cómo! La neblina no me deja ver... ¿Dónde estás amor mío? Quiero gritar hasta desgarrarme la garganta hasta que escuches mi eco mil veces decirte te amo...

¡Por qué te amo! Siento este amor inmenso que me quema por dentro, pero no sé, no sé, no sé, como expresarlo... Tengo miedo, mucho miedo y tantos sentimientos encontrados... Quisiera llorar y formar un océano con mis lágrimas hasta que sus olas lavaran mi alma, y la sal cauterizara mis heridas que sangran, y quedar limpia de esta ira, dolor, angustia, desesperación frustración y de impotencia que me han ido matando desde dentro... Tú, ¡no tienes la culpa! ya no cargues más esa piedra que tanto dolor te causa, has pagado tus culpas... ¡No sufras más por mí!...

Ven y abrázame, déjame amarte, besarte y hacerte el amor, tierna y delicadamente, hasta hacerte vibrar, sentir, y disfrutar la explosión del fuego de mi pasión, déjame amarte al compás del Bolero de Ravel... Y hacerte el amor intensamente... Y será la mejor noche que hoy habremos tenido... Y mañana... Mañana te diré exactamente lo mismo... Porque para entonces como el cristal soplado... Nos habremos fundido en un abrazo... Siempre tuya... Magali.


A mi esposa amada

Mi amor, en estos últimos días he sufrido tanto y me ha sido tan difícil aprender mi lección, dejé mucho… ¡Por tan poco! ¡Y me he dado cuenta lo que significas en mi vida! Eres una mujer que vales mucho, mucho. Aprendí que si tengo algún sentimiento, debo compartirlo contigo, no importa cuál sea, el terrible miedo que tengo al hablar de mis sentimientos sólo me ha traído problemas... Aprendí a conocerte mejor… Aprendí que no es la fidelidad del cuerpo la más importante, sino la fidelidad del alma. Descubrí que soy egoísta, y que tú deseas una pareja que piense en ti, y que esperas lo mejor de mí…

Aprendí que una familia feliz se construye con sacrificio y trabajo, con entrega y amor de cada día, pero no había querido pagar el precio, no había estado dispuesto a esforzarme más esperaba la felicidad en bandeja de plata, ahora sé que no es así, que todos los días debo luchar por tu amor. Aprendí a valorar la lucha diaria que ligeras por mantener, administrar y organizar nuestro hogar, nadie lo hubiera hecho mejor, tú estás aquí conmigo porque Dios te puso en mi camino, y le doy infinitamente las gracias porque no pude haber elegido a una mejor mujer como esposa si no a ti…

Y por eso quiero hacerte una promesa que viene desde el fondo de mi corazón: No me pidas que te deje, no quiero separarme de ti, iré a donde tú vayas y viviré a donde tú vivas, tu pueblo será mi pueblo, y mi Dios será tu Dios, donde tú mueras, quiero morir yo, y ahí deseo que me entierren. Que el señor me castigue con toda dureza si me separo de ti, a menos que sea por la muerte... Mi amor, ¿te quieres casar nuevamente conmigo?



14 de Febrero… Serás papá…

Mi vida, te he extrañado tanto estos días, quisiera retroceder el tiempo y sentir tu cuerpo tibio junto al mío amándonos... Mañana es 14 de febrero, y no estaremos juntos como otras veces... pero me hace feliz saber que más pronto de lo que imaginas podré sentir el palpitar de tu corazón... Ya hace dos meses que te fuiste, pero lo hiciste sin saber que la dicha que nos esperaba no se compara con la felicidad que hemos vivido... Yo estoy aquí, con lágrimas en los ojos... Pensándote, imaginando en que cara pondrás al recibir mi carta y saber lo que yo sé ahora...

¡Ni te lo imaginas!, a veces pienso que lo nuestro es un sueño maravilloso del cual no quiero despertar, porque nuestro amor es perfecto, es indescriptible, jamás pensé que amar, y sentir lo que siento, este cosquilleo en la barriga al pensarte, como una adolescente... Mi mano temblorosa al escribirte... Y sentir que mi ser, mi alma, mi espíritu, te pertenecen... Quiero que sepas... ¡Qué te amo!... Te amo muchísimo... Y que nuestro amor se ha empezado a cristalizar con lo más hermoso que pueden esperar unos locos enamorados como lo estamos nosotros... ¡Mi vida! hoy he recibido la noticia más hermosa... (Estoy llorando)... ¡Serás padre! Dentro de mí...

Ya hay un angelito que nos ha mandado el cielo por el amor que nos tenemos... gracias mi vida, por prolongar de esta manera, el amor que siento por ti... Cariño mío Gracias porque eres para mí la vara de equilibrio que me permite caminar, por ser venda y ungüento para los cortes y golpes de la vida; por ser un eslabón de oro en la cadena de la vida, por estar a mi lado cuando parece que todo desapareció. Gracias por permitirme amarte en la forma en que te amo.

Es por todo eso que te necesito a mi lado, porque al irte tú, todo lo que has enseñado desaparecería, porque tú me enseñaste a escribir de esta manera mis sentimientos, yo sólo lo descifro porque te necesito a mi lado para seguirte amando, porque quiero y deseo que los dos caminemos por los senderos más hermosos que tiene la vida, tomados de la mano…

Y si alguna vez llegara desesperación y hubiera la necesidad de caminar sobre espinas que se claven en lo más profundo de nuestras almas, o con las piedras que nos obstruyen el llegar a la cima de nuestro destino, seguiríamos de la mano y aún con más fuerza seguiríamos adelante, sin quedarnos en medio del camino porque el amor que sentimos siempre sobrevivirá más allá de la vida misma, más allá de la muerte… Te necesito conmigo, lucha amor mío, porque tienes una familia que te espera y que te ¡adora! Cariño mío, recupérate pronto, esfuérzate por hacerlo porque te necesito a mi lado, y me duele verte así.


Carta a mi esposa

Te escribo estas líneas tengo la necesidad de hacerlo, ya sabes que a mí me cuesta mucho trabajo escribir lo que siento, ese don lo tienes tú, sin embargo, lo intentaré. Llegué a tu vida en un momento difícil para ti, cuando tu más necesitabas de alguien que te amara, te comprendiera y te llenara de ternura, pero a pesar de que disfrutaba tu compañía, no creí que fuera yo el indicado para ser tu compañero, sin embargo, tú tenías otros planes. Pasó el tiempo y empecé a conocerte más y más, éramos los mejores amigos, ¿recuerdas?, a todos lados íbamos juntos, donde estaba Magali, ahí estaba Gerardo y viceversa...

 Llegó un momento en el que ya no pude separarme de ti, me hiciste tuyo en toda la extensión de la palabra, fuiste mi primera vez, a partir de ese momento seguiríamos juntos siempre, como las vías del tren. Pasó el tiempo y aprendí muchas cosas de ti, tu entrega, tu coraje, tu ternura, tus ganas de vivir, ese don maravilloso de ser madre, el apoyo incondicional que me diste en todo momento, en fin, no sé de dónde sacas tanta fuerza para darte a los demás, sobre todo a mí que a veces creo no merecerlo, pero como todo, llega el momento de hacer un alto en el camino para mirar atrás, ver lo que has significado en mi vida y sobre todo para decirte:

Gracias. Ahora, sé que necesitas de mi apoyo, de mi consuelo, de unos brazos que te acurruquen y sentirte amada, de una palabra de aliento para que sigas adelante, para que pienses que en la vida hay momentos que parece no resolverse nada pero que al final del túnel, está la luz de un nuevo día lleno de esperanza, de cosas maravillosas para vivirlas juntos, tú y yo.


Mi amor...

Es maravilloso vivir a tu lado compartiendo dichas y alegrías, problemas y sinsabores, quiero que sepas que a tu lado estaré siempre que me necesites, eres una mujer muy valiosa y sé que saldrás adelante porque estás hecha de un material diferente, yo te amo con un amor diferente, un amor madurado por los años, te amo por lo que eres y por lo que has traído a mi vida, Porque te admiro y respeto, porque cada vez que estamos separados ansío volver a verte, por favor en estos momentos apóyate en mí, que yo sabré consolarte cuando lloras, festejarte cuando aciertes, aconsejarte cuando lo necesites, seguir juntos como las vías del tren y sobre todo... Amarte eternamente. Siempre Tuyo: Tu Flaco


Carta número 12
Mi vida, desde que tú partiste mi alma se llenó de soledad y tristeza, contigo te llevaste mi sonrisa, mi alegría de vivir y parte de mi corazón, aún siento tus cálidas manos sobre mi rostro limpiando lágrimas que derramé cuando partiste, y tu voz susurrando en mi oído diciendo que pronto estarías de vuelta, ha pasado ya un año y tu regreso cada día se prolonga más, no puedo entender porque no vuelves…

¿Por qué?... Intento disipar mis dudas recordando tus palabras “no hay nada en el mundo que haga que te deje de amar”, entonces amor mío, yo me pregunto: ¿Por qué no has vuelto? ¿Acaso te olvidaste de mí? ¡No te das cuenta que me estás destrozando el alma! ¡Que mi vida no tiene sentido sin ti! Mes a mes desde que partiste, no he dejado de escribir tu nombre, en hojas de papel llenas de lágrimas, de amor, ilusión porque sean contestadas, y jamás he recibido respuesta…

Por eso, quiero que sepas que he tomado una difícil decisión… ¡No te esperaré más! No puedo prolongar más esta agonía sin saber nada de ti… Te esperaría toda la vida si me lo pidieras… Pero ¡ya no puedo más!, ha sido demasiado el silencio de tu ausencia.



Para ti mi amor

En este día tan especial quería donarte algo especial, algo que nadie más pudiera darte. Pero no es fácil encontrar un don que exprese lo que siento… ¿Qué don se compara con lo que ya es nuestro y que verdaderamente es lo que cuenta? Nuestras esperanzas, nuestros sueños. Los momentos compartidos son los tesoros más preciados que jamás podríamos desear. No puedo darte nada más hermoso que aquello que ya tenemos. Pero para disipar toda duda de mi cariño por ti y de lo que supimos construir juntos, mi don este día tan especial es la confirmación de mi amor por ti, mi gratitud, mi admiración, y mi pasión, ahora y por siempre jamás, ya tienes los tesoros más preciosos que tenía para darte: Mi corazón, mi alma mi amor eterno…


¿Continuar o concluir?

Amor mío, han pasado ya algunos días desde que te fuiste, días que me han parecido eternos, pareciera que el reloj se ha parado y no avanzaran las horas, y yo, ¡siento que no puedo más! Mi vida, estoy sufriendo mucho, en espera de saber tu respuesta, con esta agonía que me mata lentamente, esperando saber si has dejado de amarme o en tu corazón aún queda una parte de amor, para regalarme a mí, una luz de esperanza...

No te imaginas cuánto he llorado, cuántas cosas he entendido, y aprendido, pero, ¡todo acaba en lo mismo!, en pensar que no te quiero perder, en la seguridad de que te sigo amando, en negarme aceptar que este amor terminó, ¡no! ¡No quiero!, ¡No puede ser así! ¡Nuestro amor es grande! ¡Es fuerte! Y siempre ha superado los desaciertos… ¿O acaso ya te he perdido? ¿Estos días no te han servido para descubrir si me sigues amando? ¿Es necesario tantos días de agonía? ¡Por favor!,

no pienses que una vez más te presiono, tómate el tiempo acordado sí eso es lo que tú quieres, sólo quería que supieras que te amo, y que sepas como me siento, no puedo fingir ante la gente, amigos y familia, pues ya han notado mi tristeza, han notado mis ganas de vivir, ¡no puedo más con esta angustia y dolor que me matan!... ¡Tengo tantas ganas de abrazarte!, ¡de besarte! y decirte que me perdones, todos los errores que he cometido no han sido con afán de lastimarte, ni de ahogarte, creí que era una forma de demostrarte mi amor, porque lo que deseaba era que te sintieras amado, ahora sé que me equivoqué, entendí que el ser humano crece a través de las experiencias y no moviéndolo en el teatro de la vida como uno quiere…

Amor mío, déjame demostrarte que todo será diferente, ¡por favor!, te pido que me dejes reconquistarte, que me dejes amarte, que me des tan sólo una oportunidad para que te enamores otra vez de mí... Sé que pasará algún tiempo para que te puedas dar cuenta de lo que deseo darte, mis ideas están claras como el agua, y sé que es lo que esperas de mí… ¡Por favor! ¡Dime algo! ¡Me mata no escucharte!... ¡No saber si estás bien! Tengo tantas ganas de dormir abrazada a ti, y de dejarme guiar por ti... Quisiera despertar por la mañana y me darme cuenta de que todo fue un mal sueño, de verme en tus ojos tristes...

Es desesperante no poder hacerlo, pensando en ¿qué pasará mañana? ¡Ya no quiero atormentarme con preguntas que sólo retumban en mi cabeza con un eco que no me deja en paz! ¡Quiero pensar que volverás! Sólo tengo el deseo ferviente más que nunca de que regreses a mi lado... Entiendo que mis constantes reclamos desconfianza, y enojos a través de los años te empujaron a tomar esta decisión, ¡perdóname! ¡Perdóname por no haber sabido hacerte feliz! ¡Perdóname por creer que diciendo cómo, cuándo y dónde hacer las cosas te haría feliz! ¡Perdóname por no dejarte tomar decisiones! ¡Perdóname por todo eso! ¡Perdóname por no dejarte crecer! ¡Por no dejarte madurar! ¡Por ser tan obsesiva y celosa! ¡Perdónamelo todo! Que yo sabré recuperar aquellos años maravillosos donde todo era perfecto…

Quiero que sepas que… Yo, independientemente de que lo que decidas, ya sea volver a mi lado o separarnos definitivamente, te prometo que jamás, ¡nunca! Volveré a mencionar este pasado tan doloroso y que sólo ha hecho que me atormente envenenándome el alma, que ha hecho que te alejes de mí, sin permitirme liberarme del amargo dolor haciéndote infeliz a ti, ¡me lo prometo también! ¡Déjame luchar por nuestra relación sí aún queda en ti amor para mí!, si no lo hay ya... ¿Qué puedo hacer? Si el amor se acaba, ya nada vale la pena intentar, sé que la vida seguirá, sé que no habrá en mucho tiempo una sonrisa en mí, sé que muchas cosas y años habrán quedado sólo en recuerdos, sé que probablemente piense en la muerte, en que todo acabaría para mí…

Pero la vida sigue, el reloj avanza y no se detiene… Y quizá estos 20 años a tu lado, sólo habrán quedado en recuerdos de papeles firmados, fotografías viejas, música del alma, cartas, poemas, promesas, años maravillosos, altibajos, y dos hijos ¡maravillosos!, fruto del amor que un día nos profesamos… ¡Pero ya!, ¡ya no quiero pensar nada más!, sólo quiero que transcurra el tiempo que me pediste para poder recomenzar, pase lo que pase, de hoy en adelante sólo haré una introspección para reconocerme, para reinventarme, para reencontrarme, para fortalecerme, para amarme, para ser otra vez ¡yo!, porque no sé, no sé, quien era, no sé en qué me convertí, no me reconozco ahora, y no sé ni quien soy...


Desilusión de ti…

Cariño mío: No sé qué ha pasado últimamente contigo, me has descuidado, no me preguntas la mayor parte de veces, ¿cómo estoy? ¿Qué proyectos tengo? ¿Qué hice en mi día? No eres cariñoso, no me siento protegida, normalmente, estás distraído, casi no hacemos el amor, y el tiempo que normalmente estás en casa… Duermes, en pocas palabras no tienes tiempo para mí...

Tiempo que deseo y anhelo con todo mi corazón… Anhelo los momentos de antaño, donde éramos felices, y no necesitábamos más que mirarnos a los ojos y darnos cuenta de que el amor salía por los poros… Yo, aún te sigo amando lamentablemente, lamentablemente, porque no te mereces que te amé como hasta hoy lo he hecho, al grado de que mi vida durante estos últimos veinte años, ha girado en torno a ti… (Sin darme cuenta, que yo, sí, ¡yo!, soy primero)

Te he perdonado cuando me has herido haciéndome sentir poca cosa, (y aunque sé que no es así) me lo has hecho sentir con tus actitudes, te he impulsado cuando has necesitado volar para cumplir tus proyectos, te he alentado cuando caes en tus profundas depresiones, he luchado hombro a hombro contigo para sacar adelante a nuestros hijos, te he comprendido y perdonado cuando en un momento de locura, es decir, cuando bebes de más… ¿No te das cuenta que te daña?, ¿qué me dañas?, ¿que tus hijos te observan?, el éxtasis del momento… Pasa… Pero, las huellas y la vergüenza de tu comportamiento, quedan ahí… Lastimando una y otra vez la herida que aún no sanaba…

Aunque no bebas hasta perderte, bebes a diario, el momento te hace olvidarte de todo y perder el respeto a tu familia y a ti mismo… Hasta dañarte y dañarme profundamente… Y sé, ¡bien que lo sé!, que no soy una perita en dulce, también tengo carácter fuerte, sí, enojona hasta decir ¡basta!, enojos que regularmente no son contigo, quizás es la frustración de no sentirme útil, de no tener nada mío, (como proyectos de vida, míos y sólo míos) como no hacer cosas que me gustan, la mayor parte de veces porque el dinero no es suficiente y prefiero utilizarlo para cosas más útiles,

(Como ayudarte en un gasto extra, por sí tú no puedes solventarlo) sé que muchas veces soy poco tolerante ante las situaciones que me frustran… Pero aun así, te amo… Porque sé y estoy consciente de que también ha habido momentos maravillosos e invaluables junto a ti, momentos que lastimosamente cada vez se van empañando más y más por las lágrimas que me ciegan y ya no me dejan ver nítidamente esos recuerdos sorprendentes en nuestra vida… Creo que has sido muy injusto conmigo, no merezco la forma en que me has humillado, la forma en la que me has herido una y otra vez…

En verdad no te imaginas el dolor inmensurable e indescriptible que siento, tanto como te he amado, no sé si es más por cómo me has dañado, o porque siento que ya me has dejado de amar. Siempre creí que llegaríamos a estar juntos hasta que estuviéramos viejitos, y tomarnos de las manos temblorosamente y llenas de pecas por el paso de los años, y que juntos aviváramos la llama de nuestro amor a través de las páginas del álbum de nuestras vidas, ya con los recuerdos arrugados y las palabras ya borrosas, pero ahí mirarlas, y darnos cuenta nuevamente cuan hermoso fue lo que vivimos…

Quisiera separarme de ti… Sólo por un tiempo, creo que es lo mejor, quiero que me extrañes, y más que me extrañes que me necesites, y más que eso, que pienses, sientas y sepas, que verdaderamente te hago falta, que seas tú, otra vez tú, que deseas seguir a mi lado (yo no necesito darme cuenta de mis sentimientos hacia ti, sé que aún, ¡sí, aún te amo!) Pero tengo miedo, muchísimo miedo, de decir cosas que te hieran por aminorar mi dolor y mi desilusión, (porque ahora estoy tan, tan, sentida contigo, que quisiera no verte más) prefiero arriesgarme a perderte aun amándote, a tenerte a mi lado sin que me ames ya.

Estoy dispuesta a dejarte libres si eso es lo que deseas, porque yo, si eso lo haré si eso te hará feliz; no tengo ya nada más que decirte, las palabras de mí para ti por ahora se han acabado, no tengo el deseo ni la voluntad de hablar contigo, y que quede claro que no es por falta de amor, es ¡por tanto dolor!, un dolor insoportable de saber que, ya no eres más que alguien que desconozco totalmente… ¿Dónde quedó tu ternura? ¿Dónde quedó el amor incondicional que me decías tener? ¿Dónde está tu apoyo? ¿Tú comprensión? ¿En dónde?

No sé si todo lo que haces es por sentirte más hombre, o por demostrarle a alguien o a ti mismo cuán hombre eres haciendo todo lo que tú ya sabes… Sé que todos los hombres lo hacen, (quería pensar que tú no, lastimaste mi ego, y eso, eso también duele mucho) No sé si porque estás harto de mí, o no tienes una buena autoestima, pero eso que haces, no es de hombres, “es de machos y cobardes” palabras que jamás, jamás pensé en pronunciarlas para ti…

No sé si por ahora yo quiera estar a tu lado, porque siento que en mí, ya se ha roto totalmente la confianza, no sé si deseo ya estar íntimamente contigo, me daría asco, vergüenza, no lo sé, quisiera olvidar todo el pasado que me lastima, pero no sé si pueda… Te amo, y gracias por darme tantos momentos de felicidad. No sé si podamos regresar pronto, si lo quieras y lo necesites, o si yo quiera y lo necesite, el tiempo lo dirá… Pero si no es así… No te preocupes por mí, saldré adelante. Y seguro que tú también. Te he amado incondicionalmente…



Debemos separarnos


Amor, comprende, no es que no te quiera, ni que trate de abandonarte. No. No es eso. Lo que sucede es que nuestra vida ha estado llena de problemas que me siento agotada, que si vuelvo a estar a tu lado, voy a estallar, y no quiero que eso suceda; prefiero pasar un tiempo con mi familia para volver a encontrarme a mí misma, y pueda regresar a tu lado otra vez convertida en una muchacha jovial y alegre de la que tú te enamoraste. Sé que también yo he sido muy problemática, que más que alegrías te he dado disgustos, pero es que siempre he pensado que aún lo más terrible se allana si está el amor de por medio y en nuestro caso no es así, quizás tú me quieras tu menos o quizá yo ya no te quiero, sólo sé que nuestra convivencia se ha hecho cada vez más pesada, y ya no podemos seguir, compréndeme y perdóname.














¿Me invitas un café? Haz clic en pay pal para invitarme ¡Gracias!


     Todos los derechos reservados
     Autor de todos los escritos
    Magali Sauceda©
2020


#poesía #poetry #frases #videopoemas #cartas #escritos #desnudandoelalma #comparteelarte #infielmentemio #intensamentetuya #nochesdeinsomnio #desvelos #letrasinconclusas #deleitepoetico #placertextual #erotismo #mujersoy #cosasdemujer #secoelelotazo #magalisauceda #versando #versameamormio #aniversario #esposa #esposo #novio #novia #boyfrend #girlfrend #magalisauceda #depresion #escritos #menupoetico #pasion #beso #pareja #tristeza #amante #mujer #hombre #mujersoy #cosasdemujer #reflexionesdelalma #desvelos #nochesdeinsomnio #sueños #motolovers #motocouple #couple #hot #lovely




Comentarios

Entradas populares